e sea posible poner en práctica una conducta propiaРde seres libres e iguales.Р Aunque cada uno de los estudios consignados tuvo su tempus, circuns-Рtancia y elaboración impuesta por su correspondiente momento, sin em-Рbargo, el anhelo que subyace y late en el itinerario de los mismos es pro-Рducto de la misma inquietud. A pesar de localizarse en sedes tan dispersasРno carecen de conexión, pues el mismo sentir jurídico a unidad alРconjunto. Cabe vislumbrar una perspectiva del derecho que vincula el ori-Рgen del mismo con la filosofía ética de la Grecia clásica, aunque, luego, elРvariable acontecer histórico y las múltiples corrientes de pensamiento, ela-Рboradas al socaire de la reflexión filosófica, teológica, moral, y más pro-Рpiamente jurídica, hayan suscitado diversas interpretaciones.